Como enamorar a una mujer

Como enamorar a una mujer
Como conquistar a una mujer

viernes, 20 de febrero de 2015

LIBRO ÁNGEL DE VENUS. CAPITULO CUARTO: ATRACCIÓN 2DA PARTE

 Capitulo Cuarto:
 Atracción, 2da Parte.

El mayor reto es superar a quien se refleja en tu espejo cada mañana. Pensaba y se decía así mismo Hino, mientas se lavaba la cara   un hilito de agua y algunas gotas se aferraban a su rostro mientras recordaba a la chica de la noche anterior. Sandra era una chica de lindo parecer, muy carismática y cuerpo menudo, torneado con una gran habilidad de encontrar el humor en toda situación. Encerrado en sus pensamientos seguía sorprendido como pudo hablar con ella sin ningún problema. Berseck quien le llevo a practicar en la biblioteca de la facultad lo motivaba en el entendimiento de la disciplina.
-Elige una chica, observa entre todas las oportunidades, la atracción es muy sutil es difícil de identificar si no estás acostumbrado. Esta sensación de poseerla pone en alerta las mujeres su radar genético responde instintivamente a tu lenguaje corporal; Sí tienes una fuerte y varonil presencia simplemente responden. Mientras decía esto y recorrían el pasillo principal algunas chicas volteaban sorprendidas, otras disimuladamente admirando el estilo peculiar de Berseck.

-¿Listo?
- No aún no.
- Sigue observando.
Hino miraba alrededor hasta que encontró aquella chica  que tomaba con firmeza un  marca textos con el cual subrayaba unas notas en su cuaderno, en su mano izquierda sostenía una paleta, era una mujer con piel pálida y tersa que contrastaba con su coqueta blusa negra, su concentración era un símbolo de solemnidad, su mirada tenía la gracia de unas pestañas largas que determinaban la belleza de su rostro una mirada densamente sensual y con unos labios rojos que invitaban a besarlos, estaba sentada en una mesa de la izquierda a un costado de los ordenadores donde normalmente los chicos consultan los libros para las tareas.
Un pequeño descuido hizo que rodara su herramienta de trabajo, provoco que se levantara  a la embajadora de tan representante perfección de la naturaleza humana para buscar su plumón por debajo de la mesa, lo cual ocasiono que Hino se pusiera nervioso, esa sensación de impulso  y miedo lo comenzaba a controlar. Berseck quien ya había vivido esto tantas veces le dijo:
-Solo tranquilízate, la emoción que tienes se llama atracción no la confundas con el miedo, vas a ir hacia ella y le pedirás su número telefónico y le dirás que te sientes atraído hacia ella.
-No tengo ningún motivo. No es momento de hablar con ella. No estoy listo. Dijo Hino.
 -Jajaja no me vengas con eso.- ¡Vamos encuentra tu estado¡ Te entregaste a Venus, ella te guiara recuerda la sensación de la seducción.

Hino cerró los ojos súbitamente respiro profundo, se colocó en blanco su mente con solo una frase no importa el resultado. Abrió los ojos y continúo, camino hacia ella decidido.
Sin dilación estando enfrente de ella le dijo:
-Oye en verdad tienes que decirme en donde compraste tus aretes, solo tengo unos minutos antes de irme, mi nombre es Hino sonriendo y estirando la mano.
 La chica que se ocupaba de sus responsabilidades universitarias instintivamente llevo su mano a su oído- ¿En verdad?
-Si son muy lindos. Hino noto como su blusa provocativa dejo ver la hermosa piel del hombro y del cuello que  mostraba de más, su sonrisa era celestial algo que cautivó la mirada de Hino era deslumbrado por su belleza fresca y punzante.
-Bien, te contare la historia, los compre cerca de casa. En realidad tengo lindos recuerdos de ellos mi hermano  me ayudo a elegirlos, sabes el ya murió. El silencio apareció por unos instantes.
-Siento mucho escuchar eso no era mi intención. Se disculpó Hino.
- No te preocupes en realidad no comprendo porque te lo dije, supongo que inspiras confianza. Yo soy Sandra.
Berseck se sorprendió de la habilidad con la que Hino había obtenido la aceptación de la chica, sin duda estaba destinado a ser uno de ellos. Aquella tarde Hino tendría una cita con ella. Regreso con a lado de su maestro con la gloria hecha sonrisa.

-Lo hice.
-Felicidades, no está mal para un principiante, es una chica interesante. Dijo Berseck, aquí tienes le entrego un nuevo pergamino:

KINO
EL AVEN encuentra satisfacción en el KINO, le corresponde hacerlo lo más rápido posible en la mujer.
El AVEN debe conocer las caricias que le favorecen para su cometido.
Para atraer a la mujer el AVEN debe realizar un KINO sin ansiedad y necesidad, tomar su mano por un instante soltarla, tomarla delicadamente del brazo, un beso en la mejilla cuando saludamos, hacer juegos con las manos pero tener en mente en ser el primero en romper el contacto, no ella.
Para enamorar a la mujer el AVEN debe realizar un KINO de beso en la mejilla más lento tocando atrevidamente las comisuras de su labios, realizar un abrazo más cálido, acariciar sus brazos, morder su cuello, jugar con el dedo recorriendo sus piernas, robar besos en la boca, respirar por su nuca, hablarle al oído de lo hermosa que es. Advertir que el AVEN debe tener la confianza de la mujer para no pasar como insolente y atrevido.

Para seducir a la mujer el AVEN debe realizar un KINO que demuestre sus habilidades de amante cualidades que se obtienen con la experiencia, esto entre las mujeres es muy valorado y favorecido porque no se encuentran ante un amante común y ordinario.
Un AVEN brinda el placer a las mujeres como lo merecen, explorando la belleza de su cuerpo.
Recordar al AVEN que las caricias ardientes solo se realizan cuando  él y su amada se encuentran a solas, ninguna mujer debe ser expuesta al juicio social.
Pergamino de Orión.


Guiado por la emoción se miraba al espejo.
-¿Qué guapo eres? ¿Las traes muertas? El joven aprendiz le hablaba y animaba a su reflejo.
 Hino se apresuraba a estar listo, se cuestionaba y se respondía solo:


-Tengo que llamarle, comprar unas flores y unos chocolates ¿Le gustaran los osos de peluche? Enumeraba una lista de todo aquello que le tendría que dar para quedar bien. Mientras tomaba el rastillo y le daba forma a su pilosidad facial que aún era escasa. Miro el reloj y noto que ya era tarde había quedado de verse con Berseck quien lo seguiría guiando.

CONTINUARA...

AVEN HINOKU
INSTRUCTOR DE SEDUCCIÓN